Caracas, viernes 19 de marzo, 1999

¿A quién más hay que convencer?

Argimiro Arratia

Especial para El Universal

Caracas.- No resulta difícil convencer a una persona medianamente instruida, de cuán importantes son las matemáticas. Durante los estudios de secundaria, y más aún en el tercer nivel, se adquiere la idea de que las matemáticas están presentes en todo, en mayor o menor grado, e inciden en todas las áreas de las ciencias y tecnologías, humanidades y artes.

Mi historia favorita recuerda cómo novedosas ideas provenientes de la Teoría de Juegos condujeron al desarrollo de estrategias para maximizar la ganancia en mercados no cooperativos, y cómo, utilizando estas nuevas leyes de la Economía a principios de esta década, el Gobierno de EEUU logró vender una gran cantidad de licencias de frecuencias de radio para uso privado y comercial, con una ganancia mayor a los 10 billones de dólares y una distribución óptima de antenas por todo el país. Una operación similar realizada en Nueva Zelanda, desdeñando el uso de las leyes matemáticas que rigen la economía hoy, ocasionó grandes pérdidas a ese gobierno y mala colocación del producto. Me gusta contar esta historia por su evidente contenido mercantilista, tópico que parece atraer la atención de multitudes, y por su final feliz: John Forbes Nash, el matemático, de cuya tesis doctoral presentada en 1950 en la Universidad de Princeton, se derivó gran parte de la teoría económica referida, recibió el Premio Nobel de Economía en 1994.

Ante tan apabullante evidencia parecería natural esperar un interés desbordado por parte de organismos gubernamentales y privados, y por el público en general, hacia las matemáticas. Sin embargo, resulta difícil justificar al ciudadano común la necesidad de mejorar y profundizar sus conocimientos matemáticos y, mucho más, de financiar investigaciones. Y esto a pesar de que está resultando un lugar común decir que el desarrollo de las naciones sólo se logra con inversión en educación; y la independencia económica ampliando las estructuras científicas y tecnológicas.

Argimiro Arratía es profesor de Matemáticas USB.